El embarazo es una de las etapas más emocionantes y significativas en la vida de una mujer. Pero para aquellas mamás que han experimentado un embarazo de alto riesgo, el camino hacia la maternidad puede ser abrumador y lleno de incertidumbres. Sin embargo, para estos casos surge la Medicina Materno Fetal.
Desde las complicaciones médicas hasta los miedos e inseguridades emocionales, las madres en estas situaciones necesitan todo el apoyo y la atención que puedan recibir.
Durante las últimas décadas, la medicina materno fetal ha sido una rama de la medicina conformada por un equipo de profesionales dedicados a brindar el mejor cuidado posible a mamás y bebés en situaciones de alto riesgo.
Con su dedicación, experiencia y pasión por lo que hacen, estos médicos y especialistas han ayudado a miles de mujeres a superar los desafíos que presentan estos embarazos.
Esta es la historia de Marlene, quien con 13 semanas de su embarazo gemelar, presentó complicaciones pero se enfrentó a la adversidad acompañada del apoyo de especialistas.
“Estaba en un punto en mi carrera en el que quería cambiar de trabajo y realizar una maestría, teníamos muchos planes, pero fue mi esposo el que primero planteó la idea de ser papás.
No teníamos prisa en embarazarnos, pero tanto en mi familia como en la de mi esposo habían antecedentes de infertilidad y estábamos preocupados de que tal vez a nosotros también nos llegara a pasar.
Cuando decides ser mamá, es cuando te das cuenta del compromiso y el sacrificio que eso significa. Descubres un amor que no conoces y que no es el mismo que con tu esposo o con tus papás, es algo hermoso y nuevo.
Recuerdo que fui a mi ginecóloga y me dijo que todo estaba bien, no tardé en embarazarme de gemelos. Todo marchaba normalmente, hasta que tuve ese sangrado a las 13 semanas.
El procedimiento que me recomendaron es normal cuando hay un riesgo de aborto, pero en mi caso, estaba en una etapa muy temprana de mi embarazo, por lo que me dijeron que era difícil que mis bebés lo lograran.
Decidí optar por una segunda opinión y así llegué al instituto: en silla de ruedas, con pleno sangrado y sin esperanzas. A pesar del miedo, me encontré con una calidez humana única, y nos dieron mucha confianza. Si yo no hubiera llegado aquí, probablemente mis hijos no hubieran nacido.
Yo logré embarazarme naturalmente, y tenemos la idea de que el instituto solo es una clínica de fertilidad, pero comprobé que esto no es así, va más allá. En la Unidad de Medicina Materno Fetal me apoyaron para continuar mi embarazo sin sobresaltos y para que mis gemelos nacieran sanos y fuertes.
Ahora además de mis niños, estoy con un embarazo de 17 semanas. Aquí tengo el sobre que indica el sexo de mi bebé, pero me esperaré a abrirlo con la familia. Estoy muy emocionada, no sé si serán globos azules o globos rosas, aunque todos están expectantes de que será una niña.
Yo celebro el volver a ser mamá, un rol que me cambió completamente la vida. Tus hijos se convierten en el centro de tu universo y en el compromiso más hermoso. Es ahí cuando descubres ese nuevo amor, y simplemente sientes tu vida completa.”
El proceso de convertirse en mamá es largo y se atraviesa por diferentes etapas que no suelen ser fáciles. Sin embargo, con la compañía de tus seres queridos y especialistas altamente capacitados, todo puede ser posible para que disfrutes al máximo cada momento.
Si tú, como Marlene, has presentado obstáculos durante tu embarazo, no dudes en acercarte a Ingenes. ¡Cuéntanos tu historia haciendo clic aquí!