"Mi camino se hizo tan largo: pasé tres cirugías, tres inseminaciones intrauterinas, tres clínicas diferentes y tres In Vitros. Dijeron que eran causas desconocidas, después que tenía desequilibrios hormonales y luego que un mioma de un centímetro impedía mi embarazo."
El Dr. Tobler, que siempre estuvo con nosotros acá, dijo que en México había especialistas capacitados, me imprimió una lista y el lugar número uno era este. Se comprometió para pasar mi historial médico y ayudarnos con cualquier prescripción que pudiera cubrir nuestro seguro.
Por videollamada le expliqué a la Dra. Gina todo, nos gustó su empatía, la seguridad que tuvo de decirnos que tendría a mi bebé y para el siguiente mes estábamos viajando a México.
Hicieron pruebas y me dieron otro resultado, tenía endometriosis y mi cuerpo estaba rechazando la implantación. En mi segundo ciclo hablé mucho con mi doctora, busqué ayuda y me dediqué a mí. Ella cambió mi protocolo, usó medicamentos en cantidades mayores y cuando hicieron esa segunda trasferencia iba emocionalmente lista, habíamos logrado más embriones que nunca y ya aquí mi doctor me dio ese hermoso positivo, me tiré de rodillas y por primera vez en mi vida lloré de felicidad.”