Louise Brown es la primera “bebé probeta” nacida en todo el mundo, concebida por Fecundación In Vitro (FIV) el 25 de julio de 1978 en Royton, Inglaterra. Su nacimiento representó un hito en la historia de la humanidad y una nueva oportunidad para que millones de personas en todo el mundo pudieran cumplir su sueño de convertirse en padres.
El fisiólogo Robert Edwards, el ginecólogo Patrick Steptoe y la embrióloga Jean Purdy, fueron el equipo médico que hizo posible uno de los nacimientos más importantes de toda la historia de la humanidad, cuyas investigaciones fueron reconocidas con el Premio Nobel de Fisiología y Medicina en el año 2010.
El equipo conoció a los padres de Louise en 1976, quienes llevanban 9 años tratando de embarazarse debido a problemas de factor tubárico, ya que su madre tenía las trompas de Falopio obstruidas. En noviembre de 1977 comenzarían las preparaciones para el procedimiento: su estimulación ovárica, fertilización e implantación en el útero, que nueve mese después traería al mundo a la primera “bebé probeta”.
Al día de hoy, más de 40 años después del nacimiento de Louise Brown, en todo el mundo han nacido más de 8 millones de bebés vía Fecundación In Vitro, cuyo número es liderado por países europeos, seguidos de Estados Unidos y América Latina.
Actualmente, cada año se realizan alrededor de 2.5 millones de ciclos de Fertilización In Vitro, resultando en unos 500 mil alumbramientos; lo que significa que cada hora nacen 57 nuevos bebés vía FIV alrededor del planeta.
Sin embargo, este tipo de procedimiento que forma parte de múltiples técnicas y tratamientos pertenecientes a la Reproducción Asistida, continúa arrojando algunas dudas e incertidumbre, principalmente debido a la falta de educación en términos de salud reproductiva; manteniendo estos como un tema tabú, aún en muchas partes del mundo.
Una de las principales incógnitas respecto a la primera bebé nacida vía FIV en el mundo, se relaciona precisamente con muchas de las dudas que persisten respecto a este tipo de procedimientos: ¿Cómo es la vida de una persona concebida mediante técnicas de Reproducción Asistida?
Louise de 44 años vive en la ciudad de Bristol, Inglaterra, su comunidad de origen, con sus dos hijos, Cameron y Aiden de 15 y 8 años respectivamente; quienes nacieron sin ayuda de ningún tratamiento de Reproducción Asistida.
“Yo no he tenido que pasar por ese proceso. Pero lo hubiera hecho, sin duda, si lo hubiera necesitado”.
explica Louise en entrevista para El País en 2019.
La mujer cuyo nacimiento fue un acontecimiento extraordinario, lleva una vida relativamente ordinaria al sur de Reino Unido junto a su familia, interrumpida ocasionalmente por presentaciones en televisión y conferencias alrededor del mundo; contribuyendo a demostrar que recurrir a la Reproducción Asistida para crear vida no debe ser un tabú, y que la ciencia es el camino para que millones de personas en el mundo puedan cumplir uno de los sueños más importantes de toda su vida: ser padres.
“Es triste que 41 años después de que yo naciera todavía siga siendo un tema tabú. Hay mucha gente que no quiere decirlo a su entorno, que no lo normaliza. Es una etapa compleja y dura, en la que se necesita ayuda.”
Louise Brown para El País.
Después de 40 años del primer nacimiento vía Fertilización In Vitro en el mundo, los avances en este campo han permitido ampliar el número de personas que pueden apoyarse de este tipo de tratamientos para crecer a sus familias, con una probabilidad de éxito cada vez mayor.
La técnica de Fertilización In Vitro ha sido perfeccionada en Ingenes gracias a los tratamientos multiciclo, con los que brindamos hasta 96% de probabilidades de tener un bebé. Una opción que ha permitido a miles de mujeres de hasta 50 años decidir el momento justo para convertirse en mamás, sin importar el tema del reloj biológico.
El Método ROPA de Fecundación In Vitro representa otro paso agigantado en la historia de la Reproducción Asistida, con la posibilidad de crear un embrión a partir del óvulo de una de las mujeres, que se implanta en el vientre de la otra para compartir su maternidad al tener un hijo que sea de ambas.
Actualmente, es posible elegir el sexo de un bebé concebido vía Fertilización In Vitro, con hasta 99% de efectividad, gracias a la técnica Eligender (exclusiva de Ingenes). Lo que no solo representa la posibilidad de tener un hijo del sexo deseado, sino que permite reducir el riesgo de presentar anomalías genéticas relacionadas específicamente con uno u otro sexo.
A medida de que las mujeres van avanzando en su edad reproductiva, existe una mayor probabilidad de presentar alteraciones genéticas en sus embriones, lo que puede ocasionar condiciones futuras que complican la calidad de vida de una persona en el futuro, como el Síndrome de Down o el Síndrome de Turner.
Sin embargo, el estado actual de las tecnologías de Reproducción Asistida, han logrado contar con diferentes estudios cromosómicos como el Diagnóstico Genético Preimplantacional y el Diagnóstico Prenatal, para reducir al mínimo esos riesgos.
Louise Brown y el equipo médico formado por especialistas en Medicina, Fisiología y Embriología, entre otros; no solo representan un antes y un después en la historia de la medicina y la salud reproductiva, sus investigaciones también sirvieron de cimiento para temas tan importantes como los estudios en células madre.
Hoy, la primera bebé In Vitro o “bebé probeta” dedica su tiempo a dar a conocer el hito que representa su vida y cómo la ciencia es un apoyo fundamental para millones de personas en todo el mundo, una oportunidad de alcanzar una de las metas más importantes en la vida de millones de personas en todo el mundo: crear vida.